CARLOS QUINTANA – Contemplación –

La contemplación como síntesis de santería y budismo

Las figuras y retratos de Carlos Quintana (la Habana, 1966) tienen en común una actitud autónoma: la distancia, expresiones faciales sin emociones y la mirada apenas comprensible, que caracterizan las figuras de Carlos Quintana, dar testimonio de una especie de introversión o más bien de contemplación. Están enfocados en algo que parece estar fuera de lo visible o internamente.. Las figuras a menudo se representan sobre un fondo de colores contrastantes y sin un entorno concreto.: lo que no sea relevante para el “contemplación” (el título de la exposición) en consecuencia, el artista lo deja fuera. Muchas de estas obras de arte permanecen implícitamente, “inconcluso” y así desarrollar una fuerza peculiar, ya que estimula el pensamiento y la imaginación – animando así a la audiencia a continuar el proceso de contemplación iniciado por el artista en y para sí mismo.